Este año se hablará del papel de la IA en el desarrollo de las fórmulas cosméticas, de los neurocosméticos, de la belleza silenciosa, de la skinificación del cuerpo, de los nuevos gadgets de technobeauty, del olor y las emociones, de los exosomas y la medicina estética.
La aceleración que imprime a la cosmética la Inteligencia Artificial coincide en el tiempo con la constatación de la conexión entre belleza y bienestar y la importancia del factor mental para un buen diagnóstico del cuidado de la piel. Echamos un vistazo a lo que viene.
Es una de las predicciones beauty de la consultora Mintel para el 2024: el bienestar mental y la apariencia física están conectados.
Habrá más tratamientos centrados en la conexión cerebro-piel que estudian cómo la estimulación sensorial puede mejorar el bienestar general.
La psicodermatología (que explora la relación entre el bienestar psicológico y la salud de la piel) y la neurocosmética (que se centra en el diálogo mente-piel) ganan terreno.
Shiseido , pionera en este campo se llevó un Nobel cosmético en el Congreso IFSCC 2023 del pasado septiembre al relacionar la transmisión de emociones positivas a través de los olores corporales, lo que abre la puerta a desarrollar productos perfumados capaces de potenciar la comunicación social entre individuos y proporcionar bienestar.
Las marcas de lujo incorporarán más bienestar y el bienestar adoptará un enfoque más lujoso: un win-win.