Leopoldo Infante nació en Venezuela. Dejó su país para mudarse a Estados Unidos con el objetivo de hacer de sus sueños realidad, pues debido a las condiciones políticas y sociales, era necesario salir a abrirse paso en otras tierras. Hoy es todo un barbero profesional que se ha ganado el respeto de algunas personalidades del deporte internacional, consumando así su sueño americano. Nos comparte su historia de éxito.
Leopoldo Jesus Infante Durán es originario de Venezuela. Cuando era joven decidió dejar su país con el objetivo de mejorar sus condiciones de vida y las de su familia. Estados Unidos fue el destino perfecto para hacer realidad el sueño de convertirse en barbero. Sin embargo, no fue un camino fácil pues tuvo que tocar puertas para lograrlo. “No es fácil llegar a un país nuevo, sin conocer a nadie. Hay miedo y muchos nervios, pero también muchas ganas de superarse y eso fue lo que me impulsó a mantenerme firme”, declaró Leo.
Se inició como ayudante en barberías y fue subiendo de nivel, hasta convertirse en un barbero profesional. Con el tiempo, tuvo la oportunidad de hacer su propio negocio. Es en ese momento cuando todo cambia y comienza a crear su propio reconocimiento. “Fue un reto encontrar puertas abiertas. No es tan simple como parece, pero una vez que logras tener frente a ti a las personas indicadas, todo comienza a fluir y a acomodarse para alcanzar las metas propuestas”, subrayó.
Su profesionalismo y dedicación, le han válido la confianza de varias celebridades del mundo deportivo, lo que lo convierte en un referente dentro de las barberías masculinas que siguen vigentes en el mundo. “Es emocionante ver como personalidades tan importantes llegan, te buscan, te recomiendan. Es gratificante que ellos mismos sean tus voceros porque eso significa que todo va por buen camino”, manifestó.
Leo dice que una de las motivaciones más fuertes ha sido el apoyo que recibe de su familia, pues han sido un aliciente para no detenerse y seguir luchando por ser mejor cada día. “Mi familia ha sido de mucho apoyo. Todos los días agradezco a la vida por tener la mejor motivación para ser mejor cada día”, detalló el barbero.
Por ahora, Leo sigue preparándose para seguir compartiendo con el mundo sus talento y pasión por el barbero. Y espera que su historia sea un motivante para todos aquellos que quieren salir adelante o quieren emprender en cualquier cosa. “Yo solo les digo que sigan luchando, que se preparen, que no pierdan de vista sus objetivos, que sean perseverantes y que poco a poco verán los resultados”, concluyó.