Después de tres años sin poder vivir esa energía musical que solo el Tecate Live Out puede conceder, el festival resurgió triunfalmente para su sexta edición reuniendo a talentos de talla internacional que descargaron toda su energía sobre los 3 escenarios que lo conformaron y ante 57 mil almas festivaleras en el Parque Fundidora.
Khalid y Lorde fueron el plato fuerte de la noche: primero el multipremiado músico arrancó su actuación en el Bacardí Stage de forma fenomenal y conectando con el público mexicano desde el primer segundo, pues para sorpresa de todos apareció sobre el escenario portando una jersey de la Selección Mexicana. Con éxitos como «Saved» y «Another Sad Love» Khalid impresionó a todos, y del baile ni hablar pues su habilidad en ello fue demostrada en las canciones más enérgicas.
Por su parte, la cantautora neolandeza cautivó con una producción de primer nivel conformada por geométricas estructuras y unas elegantes escaleras que le dieron la bienvenida al Tecate Stage con «The Path», canción que dio inicio al show. Ataviada en un conjunto muy otoñal que hacía juego con la vestimenta de sus impecables músicos, Lorde conquistó y reconquistó a Monterrey canción tras canción resultando en una de las actuaciones más épicas del festival.
El cierre en el Tecate Room estuvo a cargo de Roosevelt, quien desprendió la mejor vibra rodeado de múltiples instrumentos que daban vida a diferentes texturas. El productor alemán fue el dueño de los beats más bailables de la noche con hits como «Sign» o «Fever», y su actuación fue tan disfrutada que terminó forrada de aplausos del agradecido público que disfrutó en grande cada minuto de su show.
Y las emociones estuvieron a flor de piel desde los primeros momentos del Tecate Live Out 2022, pues no pudo haber mejores encargados de dar el banderazo en los escenarios que Noah Pino Palo en el Tecate Stage, Plano en el Bacardí Stage y Freebot en el Tecate Room.
Más tarde, y con un público eufórico, Jungle desató los coros con éxitos como «Keep Moving» y «Casio», para finalmente llegar al éxtasis con «Busy Eamin» como punto final de su actuación.
El poder de las tornamesas estuvo a cargo de Purple Disco Machine, quien fue el anfitrión de una masiva fiesta en el Bacardí Stage con un espectáculo de luces que alumbró a todos los que se encontraban en la zona.
La tendencia la marcó Polo & Pan con un repertorio con el que fue imposible quedarse quieto, dejando claro su virtuosismo en las tornamesas. Y Clubz no se quedó atrás haciendo vibrar a todos al compás de sus beats.
El indie de Yellow Days fue el soundtrack de una atmósfera perfecta frente a los escenarios a cargo de canciones como «A Little White» o «The Way Thing Change». Mientras que Yungblud fue el alma de la fiesta. La euforia voraz que lo invade explotó sobre el escenario para dar un show de otro mundo envuelto en una intensidad tan única como él.
The Change lideró a un séquito de fans que llenaron la tarde de fuertes coros, en especial con «Hora Loca», uno de los temas favoritos de su público. Y los angelinos de Saint Motel sonorizaron el Parque Fundidora como nadie con «My Type», llevando su actuación más allá con AJ encontrándose con su público bajo el escenario.
El folk de Smith & Tell fue una de las apuestas más aclamadas del festival, y Yoss Bones hizo lo propio con su gran dosis de hip hop y R&B.
La cara de sorpresa de todos los presentes fue evidencia del virtuosismo de Too Many Zooz en cada uno de sus instrumentos y su manera de encender a la gente en el festival. Por su parte, el misticismo soft de Pahua y su mezcla sonora tan emocional regaló al público un gran momento.
Miranda Santizo y Priest fueron otras de las grandes cartas que el Tecate Live Out presentó con una mezcla de géneros y ritmo que terminó por fascinar a toda alma presente.
La sexta edición del Tecate Live Out fue todo un éxito. Su presencia ya hacía falta en toda aquella escena que disfruta de las mejores y más frescas propuestas de lo alternativo, y cada una de las joyas presentadas este 2022 hicieron de su repertorio el soundtrack perfecto de un regreso triunfal.